Normalmente lloro en los matrimonios, pero asistir a la renovación de votos de cuatro parejas fue demasiado para un día. Lo celebramos en la Iglesia que conmemora las Bodas de Cana, que fue el primer milagro de Jesús impuesto por María. Celebramos tan importante día con vino dulce de Cana (dicen que es el mejor del mundo). Fotos 1y2.
Partimos hacia Tiberiades, a conocer el Mar de Galilea el cual es el único depósito de agua dulce, que en realidad es laguna pero se tituló mar porque en el antiguo hebreo no había una palabra para describirlo. Después de cantar (solas las dos) nuestro himno nacional, nos embarcamos en la laguna, para contemplar el lugar en donde Jesús camino por el agua (fotos6y7). Tanta paz y silencio, indescriptible.
En todo este sector es donde creo, más acontecimientos sucedieron. Uno de ellos es el Santuario de las 9 Bienaventuranzas (foto3) “Beati qvi lygent ovoniam ipsi consolabvntur” (Bienaventurados los que lloran porque serán consolados), la Iglesia de la multiplicación de los 5 panes y 2 peces y la Casa de Pedro (Pescador de hombres) en Kafarnaum; conocida por ser la ciudad de Jesús, porque es donde vivió con Pedro, comenzó a reunir a los apóstoles y es en donde muchos milagros se realizaron (foto4).
Otra visita obligada es al Primado de Pedro (foto5) en donde Jesús le da la misión de cuidar a sus ovejas. Este es el legado que comenzó con el primer papa del mundo.
La última foto fue regalo de Horacio en el Santo Sepúlcro y conmemora el último día junto a los Peregrinos de Argentina. Conocimos la parte norte de Israel gracias a ellos, un grupo de distintas partes de Argentina pero con nuestra misma misión: “Seguir sus huellas”.