Nos escapamos con la Panchi a la ciudad de las Caipiriñas (mezcla de cachaça, limón y azúcar) las cuales venden por todo lados, hasta los ambulantes en la misma playa, aunque aprendimos que no es recomendable comprarlas ahí porque a veces les ponen uno que otro remedio para hacer tutin (tuto o tutin = dormir) y luego tus cosas por arte de magia desaparecen.
Ese y otros tips nos dio Favio Reis (promotor de los mejores tours y excelente persona: +5521981644858) quien se dio el tiempo de contarnos todas las maneras de estafar posible, como la de unos niños que ensucian tus zapatos con mostaza para luego limpiarlos y pedirte reales a cambio o como unos tatuadores que dicen que te harán el diseño que tú quieras por 50 reales y luego te cobran USD50.
Los imperdibles según mi criterio son: Subir a Pan de Azúcar (R$80) y aprovechar el atardecer mirando toda la bahía y el Cristo (1ra, 3ra y 4ta foto), comer pan de queso, ir a gastar dinero al Mall Rio Sul porque es económico para un chileno (hay buses de acercamiento gratis desde el Metro Arco Verde), comer pan de queso, caminar por Ipanema y Copacabana (5ta. y 7ma. foto) esquivando a todos los vendedores de pareos, pañuelos, acai y agua de coco, comer pan de queso, conocer la maravillosa escalera Selarón porque la hizo un porteño de Valparaíso (2da. foto), visitar el Cristo Redentor por R$41 para agradecer y rezar un poquito (6ta. foto) y entrar a conocer la Favela Tabajas (la que fue nuestra casa) arriba del Metro Siqueira Campos, para dejar de creer todo eso que la tele mete en tu cabeza (puedes entrar comiendo pan de queso).